México | Blindaje

CNB propone proteger las joyerías con policarbonato antivandálico

Tras el asalto a un establecimiento de joyas en una lujosa plaza de la CDMX, el Consejo Nacional de la Industria de la Balística (CNB) ha sugerido instalar policarbonato antivandálico en este tipo de negocios.

escaparate de una joyería Cartier

El vidrio blindado es insuficiente para brindar una óptima protección a las joyerías, observan desde el CNB.

Fuente: Consejo Nacional de la Industria de la Balística (CNB).

Los negocios como las joyerías deben reemplazar el vidrio blindado por policarbonato antivandálico. Esta ha sido la recomendación de René Rivera, presidente de la Comisión de Blindaje Arquitectónico y Enlace con Autoridades y Asociaciones del Consejo Nacional de la Industria de la Balística (CNB), tras el reciente asalto a un establecimiento de joyas en una lujosa plaza de la Ciudad de México (CDMX).

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Concretamente, los delincuentes rompieron, a marrazos y hachazos, los vidrios blindados de la joyería. El asalto apenas duró 10 minutos, tiempo en el cual cuatro sujetos robaron 15 relojes de alta gama. Una acción que contribuye a aumentar las estadísticas delictivas de la CDMX. En este sentido, según la Fiscalía General de Justicia de la capital mexicana, se registran más de mil asaltos al mes a los negocios de la ciudad.

Policarbonato antivandálico: un material adecuado para proteger joyerías

En el caso particular de las joyerías, Rivera ha manifestado que “se trata de negocios que están expuestos a ser vandalizados de una forma muy violenta, con el uso de objetos contundentes, para vulnerar los cristales de las vitrinas y fachadas y extraer las joyas de alto valor”.

Para este tipo de establecimientos, el representante del CNB ha recomendado usar policarbonato antivandálico. Y en zonas de mayor riesgo, como las puertas de acceso, un policarbonato balístico de mayor grosor. Dicho material es más adecuado que el vidrio blindado –que se instala para proteger contra armas de fuego–, puesto que, si bien ofrece cierta resistencia, al final termina quebrándose y cediendo ante los golpes de marro, mazo o hacha, ha argumentado.

De manera más precisa, René Rivera ha aconsejado colocar un policarbonato antivandálico de entre 9 y 12 milímetros en las ventanas o vitrinas –aunque el grosor podría ser mayor–. Y en las puertas de las joyerías, un policarbonato de hasta 32 milímetros. En todos los casos, dicho material ha de montarse sobre estructuras de acero para brindar una mayor resistencia a las intrusiones.