Orlando Alfonso Clavijo Clavijo SuperintendenteSuperintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada

“La Supervigilancia debe ser un organismo más eficiente y moderno”

Orlando Alfonso Clavijo Clavijo Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada

Orlando Alfonso Clavijo Clavijo, superintendente de Vigilancia y Seguridad Privada de Colombia.

Desde octubre de 2019, el doctor Orlando Alfonso Clavijo Clavijo está al frente de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada colombiana. Durante su encuentro con ‘Segurilatam’, declaró que el organismo adscrito al Ministerio de Defensa Nacional está trabajando para mejorar sus servicios y favorecer el crecimiento del sector privado. “Tenemos que hacer todo lo posible para generar optimismo y propiciar que las empresas, a su vez, contribuyan al fortalecimiento de la economía del país”, observó.

-Según los datos que obran en poder de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada (Supervigilancia), ¿cuántas empresas de vigilancia y seguridad privada operan legalmente en Colombia? ¿Qué porcentaje del PIB nacional representa el sector?

A la fecha de realizar la presente entrevista, tenemos contabilizadas 677 empresas y 48 cooperativas. Pero la Supervigilancia controla, además, a escuelas de formación, departamentos de Seguridad, compañías blindadoras y arrendadoras, asesores, consultores, investigadores…

De forma directa, el sector de la vigilancia y seguridad privada colombiano da empleo a más de 400.000 trabajadores incluyendo el personal administrativo. Y representa el 1,9% del PIB, aproximadamente. Es toda una industria, un sector muy grande que ayuda a hacer patria. Por eso es necesario vigilarlo, defenderlo e impulsarlo.

-Usted tomó posesión de su cargo en octubre del año pasado. En estos meses, ¿cómo ha encontrado al sector de la vigilancia y seguridad privada colombiano?

Como es habitual cuando se producen cambios, encontré un sector intranquilo, nervioso y con muchas inquietudes. Pero desde el primer día, me he preocupado de tener una comunicación directa con el empresariado. Si lo que se desea es mejorar un sector, hay que escucharlo, dialogar con él, conocer sus problemas y buscar soluciones para resolverlos.

-¿Cuáles han sido las principales inquietudes que le han trasladado los empresarios del sector?

Uno de los grandes problemas que tenían era el tema de la concesión de las licencias y las renovaciones, que se demoraban años. Al respecto, hemos hecho un gran esfuerzo para ponernos al día con todos los asuntos pendientes desde 2014. Otro asunto que les preocupaba era el de las reposiciones y las apelaciones. En 2019 atendimos más de 16.000 casos y este año esperamos hacer lo mismo con otros 20.000. Poco a poco, confiamos en dar respuesta a todas sus inquietudes y resolverlas. Y lograr así que la Supervigilancia sea un organismo más eficiente y transparente.

-Su llegada a la Supervigilancia coincidió con la entrada en vigor del decreto que autoriza la renovación de las licencias por 10 años a las empresas de vigilancia y seguridad privada. ¿Cómo ha sido acogida esta medida por el sector?

Apenas me posicioné en el cargo, de inmediato di la orden de que las empresas que cumplían tuviesen una licencia por un plazo de cinco años. Y, seguidamente, comenzamos a expedir las primeras licencias y renovaciones a 10 años en aplicación del Decreto Ley 2106 de noviembre de 2019, más conocido como Decreto Ley Antitrámites.

Eso ha motivado mucho al sector. Los empresarios están contentos, porque podrán dedicar más tiempo a sus empresas en lugar de estar preocupados por los trámites. Y a la Supervigilancia también le beneficia al reducirse la carga de trabajo. Algo de agradecer, ya que somos un organismo muy pequeño. Debemos aprovechar los recursos que tenemos y destinarlos a nuestra verdadera misión: ejercer el control, la inspección y la vigilancia de la industria y los servicios de vigilancia y seguridad privada.

“El sector de la vigilancia y seguridad privada da empleo a más de 400.000 trabajadores incluyendo el personal administrativo”

-¿Hasta qué punto les preocupa a los empresarios colombianos el interés de la inversión extranjera?

El Estatuto de Vigilancia y Seguridad Privada (Decreto 356 de 1994) no permite que haya inversión extranjera en el sector. Por lo tanto, no es un tema del que suela hablarse. Lo cual no significa que no haya debate. Hay quienes se posicionan a favor y en contra. Si existe un gran acuerdo, estoy dispuesto a llevar el asunto al Congreso de la República de Colombia para modificar el Decreto 356.

-Como sucede en otros países, en Colombia preocupa que haya empresas que operen ilegalmente. ¿Cómo se las combate?

Efectivamente, la ilegalidad es un asunto que preocupa. Se considera que el 40% de los servicios que se prestan son ilegales. Una de las iniciativas que hemos llevado a cabo ha sido reunirnos con Nicolás Uribe Rueda, presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá, para, a través de un convenio, evitar que la institución registre empresas multiobjeto. A los servicios de consejería, aseo o arrendamientos, estas últimas incluyen los de vigilancia y seguridad privada. Y eso no puede ser. Las empresas del sector deben tener un objeto único: la prestación de servicios de vigilancia y seguridad privada. Quien no lo haga así, operará ilegalmente.

También nos hemos reunido con los administradores de los conjuntos de propiedad horizontal o de centros comerciales para que se abstengan de contratar los servicios de empresas que carezcan de la licencia de la Supervigilancia. Gracias a este tipo de actuaciones, y a las denuncias, estamos avanzando muchísimo.

Por eso es importante disminuir el volumen de trabajo que tenemos relacionado con los trámites. Necesitamos más funcionarios disponibles para controlar, inspeccionar y vigilar. Así podremos combatir la ilegalidad más eficazmente.

-Durante el presente año, ¿qué proyectos espera materializar la Supervigilancia para que mejore el sector de la vigilancia y seguridad privada?

Tenemos proyectos muy importantes. Como he comentado anteriormente, uno de ellos es la agilización de los trámites, que se demoran porque no estamos lo suficientemente digitalizados. Pero esto va a cambiar. Espero que, a final de año, el sector pueda hacer sus trámites (carta de paz y salvo, certificados, licencias, etc.) de forma virtual. Esto es fundamental. Y también eliminar el cobro de algunos trámites para facilitarles la vida a los empresarios.

Otro tema que queremos solventar es la ampliación de la licencia para los registros caninos. Asimismo, deseamos firmar un convenio con el Instituto Colombiano de Normas Técnicas y Certificación (Icontec) para crear una resolución de mínimos sobre los niveles de blindaje 3, 4 y 5, que son los que nosotros autorizamos.

Además, sería muy conveniente contar con una certificación antisoborno para que el sector sea más transparente, actualizar la resolución de los uniformes para los vigilantes, mejorar los protocolos para las empresas del transporte de valores y poner en marcha un Observatorio de Vigilancia y Seguridad Privada que permita abordar los temas que preocupan al sector.

-Al margen de los que ha citado, ¿también tienen proyectos en el ámbito legislativo?

Sí. En relación a la Ley 1920 de 2018, conocida como Ley del Vigilante, conviene recordar que los vigilantes están obligados a realizar unos cursos de formación. Y tienen que superar un examen psicofísico. Sin embargo, en los municipios pequeños no existen centros donde puedan realizar dicho examen. La solución pasa porque las Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) puedan hacerlo. Y en eso estamos centrados.

Otro asunto muy importante es que los vigilantes tengan un seguro de vida que los cubra las 24 horas del día, estén o no en servicio. Confío en que estos dos temas se cumplan cuanto antes.

“Al existir un principio de complementariedad, las empresas de vigilancia y seguridad privada forman parte de la seguridad nacional”

-¿Hasta qué punto la seguridad privada apoya a las fuerzas oficiales para reforzar la seguridad ciudadana?

Las empresas del sector tienen que estar inscritas en la Red de Apoyo y Solidaridad Ciudadana (RASCI) para que exista una comunicación con la Policía Nacional. Al existir un principio de complementariedad, las empresas de vigilancia y seguridad privada forman parte de la seguridad nacional. Por eso están bajo el control, la inspección y la vigilancia del Estado.

Dicho esto, el sector privado es fundamental para garantizar la seguridad ciudadana. Por ejemplo, cuando hay protestas o manifestaciones suele generarse desinformación a través de las aplicaciones de mensajería o las redes sociales. Y gracias a la relación existente con las empresas de vigilancia y seguridad privada, la Policía Nacional puede confirmar o desmentir esas informaciones. La colaboración es muy efectiva. Sin duda, los vigilantes ayudan mucho a la seguridad pública y contribuyen a que haya una percepción de seguridad en los condominios.

-Además de abogado, usted es periodista y comunicador social. Considerando este último perfil, ¿qué opinión le merece que un medio de comunicación especializado como el nuestro se ocupe del sector de la seguridad colombiano?

Es muy bueno que a través de un medio de comunicación especializado se pueda dar visibilidad al sector, discutir cualquier problemática u opinar. Y como lectores, enterarnos de las últimas tendencias para poder mejorar. Felicito a todo el equipo de Segurilatam por la labor que realiza.

Fernando Pérez y Alfonso Orlando Clavijo Clavijo
Nuestro compañero Fernando Pérez durante la entrevista a Orlando Alfonso Clavijo Clavijo. El superintendente de Vigilancia y Seguridad Privada nos dio sus impresiones sobre un sector que representa, aproximadamente, el 1,9% del PIB colombiano.
Corferias acogió el Día Nacional del Vigilante

El 26 de noviembre del año pasado, en el recinto ferial Corferias de Bogotá, representantes de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada y del sector celebraron el Día Nacional del Vigilante para reconocer la dedicación, trabajo y aporte a la seguridad de dicha figura.
Al preguntarle sobre la jornada, el superintendente mostró su satisfacción a Segurilatam. “Se organizó en menos de un mes. En tiempo récord, logramos celebrar una gran fiesta en un sitio espectacular como Corferias. Los vigilantes quedaron muy satisfechos. Fue un evento muy importante en el que trabajamos el Ministerio del Interior, el Ministerio de Defensa Nacional, la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada y los gremios. Confiamos en que este año sea mejor aún”, manifestó Orlando Alfonso Clavijo Clavijo a nuestra publicación.

Día Nacional del Vigilante 2019 Colombia