¿Qué significa para Verónica Torres Landa la conmemoración del Día Internacional de la Mujer?
El Día Internacional de la Mujer supone recordar, y nunca olvidar, la lucha de las mujeres por participar en condiciones iguales que los hombres. Es hacer valer los derechos que contamos como mujeres, generar conciencia sobre la importancia de empoderarnos en el entorno que deseemos desarrollarnos profesionalmente y vivir en igualdad de escenarios.
Como consecuencia de la decisión adoptada en Copenhague en 1910, año en que se promulgó el Día Internacional de la Mujer, se ha logrado el derecho a votar, trabajar, formarse profesionalmente, participar en cargos públicos, tener presencia en puestos de liderazgo… Además, dicha conmemoración ha facilitado abordar el tema de brecha salarial y la no discriminación laboral.
En el caso de la seguridad privada, hoy se cuenta con un gran liderazgo de mujeres como CEO de empresas, directoras generales en asociaciones, directoras operativas, administrativas, guardias, etc. En cualquier nivel existe una mujer que nos representa dignamente.
¿Por qué Verónica Torres Landa eligió desempeñarse en el sector de la seguridad privada? ¿Qué aporta a esta industria?
Venía de haber trabajado en la seguridad pública en el ámbito de gobierno federal. Esa etapa fue maravillosa profesionalmente, por lo que busqué seguir trabajando en esquemas donde poder transformar la vida de los ciudadanos de México. Algo a lo que contribuye la seguridad privada como coadyuvante de la seguridad pública con el objetivo de salvaguardar la integridad física y patrimonial de las personas. Además, la seguridad privada es un modelo de vida y un gran modelo de negocio a nivel empresarial.
Como profesional y, sobre todo, como directora general de AMESP, mi aporte ha sido y será buscar consolidar, hacer crecer y fortalecer la industria de la seguridad privada como garante de la legalidad. Y también la profesionalización y la representación necesaria para que las autoridades reconozcan a este sector como esencial para la vida económica, política y social del país.
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Bajo su punto de vista, ¿qué aportan las mujeres, independientemente de su rol, al sector de la seguridad privada? ¿Cuál es su valor agregado?
Somos mujeres profesionales con pasión, entrega y amor a la actividad que realizamos en el ámbito que nos toca desempeñarnos. Sabemos celebrar logros y tomar medidas que ayuden a mejorar la calidad de vida de los colaboradores de la industria de la seguridad privada.
Buscamos brindar mejores oportunidades en todos los ámbitos de nuestra profesión, así como el reconocimiento por lo que realizamos, para dejar de competir con los hombres y trabajar juntos en proyectos de cambio.
A juicio de Verónica Torres Landa, ¿cuáles son los principales retos de las mujeres en el sector de la seguridad privada?
A día de hoy, creo que los retos son más personales que profesionales. Es decir, en mi caso la competencia ya es entre iguales. Si consideramos que existen mujeres en los más altos niveles de seguridad pública y privada en México, así como dentro de la seguridad corporativa, queda patente que están posicionadas en niveles top a nivel mundial en el sector.
Estoy convencida de que el principal reto es garantizar el libre ejercicio de derechos y libertades de los colaboradores dentro de la seguridad privada. Y con ello lograremos hacer más atractivo el sector para la mujer y que la representación refleje mejor el lugar que ocupamos como sector productivo en México. Sobre dicha cuestión, las estadísticas del Seguro Social reflejan que la participación de la mujer en el mercado laboral formal se ha incrementado en los últimos años. Actualmente, las mujeres representan el 39% del empleo total.
Y otro reto puede ser aportar para que la seguridad privada en México sea un símbolo central de la seguridad ciudadana que nos permita generar insumos a todos los ciudadanos. Ello para transitar con mayor prevención y reacción ante el embate delincuencial en cualquier situación o momento en que esto suceda.
Para finalizar, ¿qué les diría Verónica Torres Landa a las mujeres que desean trabajar en el sector de la seguridad privada?
Les diría que trabajar en la seguridad privada es engrandecer y dignificar la profesión. Esto nos permite proponer procesos, procedimientos, líneas de actuación, métrica, data, funciones y logros en todos los servicios que presta el personal y que no solamente se limita a los guardias de seguridad privada.
Cuando ingresan a este mundo laboral, las mujeres han de conocer el rol que representan como profesionales de la industria y que son parte coadyuvante de la seguridad pública.
Pero lo más importante que deben saber es que la seguridad privada tiene que ser vista en su justa dimensión: una industria estratégica vinculada al desarrollo, pues acompañamos el crecimiento de las ciudades. Acompañamos con entrega, pasión, lealtad, valentía, tecnología y profesionalismo la creación y continuidad de los negocios, las infraestructuras y sus procesos… Y también la seguridad de las familias, sociedades, industrias y comercios mexicanos y extranjeros con presencia en México.
También les digo que conozcan la seguridad privada y hagan de ella su vida. Que la seguridad es más que guardias. Somos una familia que busca la protección, vigilancia y custodia de personas, valores, infraestructuras, información, centros comerciales, desarrollos residenciales, hoteles, autopistas, hospitales…
Y todo ello lo hacemos a través de medios tecnológicos como sistemas de videovigilancia, alarma y monitoreo; procesos de investigación, capacitación o consultoría; medios físicos como los blindajes de personas (uniformes), automóviles y construcciones arquitectónicas; tecnologías de vanguardia de protección en el entorno cibernético; traslado y custodia de valores, bienes y servicios; inteligencia corporativa… Y todo lo que cada día se requiera para generar seguridad a las personas.
