José Luis Calderón Eximco
José Luis Calderón Director comercial Eximco

Protección perimetral en las instalaciones bancarias

Según José Luis Calderón, director comercial de Eximco, un sistema de protección perimetral es el conjunto de recursos que conforman la primera línea de defensa de instalaciones críticas como las bancarias.

sistema de protección perimetral

Un sistema de protección perimetral debe estar más orientado a la disuasión y el retraso.

Actualmente, México está siendo víctima de actos de insospechada violencia que nos obligan a revisar el enfoque de la protección de las instalaciones de los distintos sectores estratégicos, incluido el sector financiero. Un sistema de protección perimetral es el conjunto de recursos humanos, tecnológicos y físicos que conforman la primera línea de defensa que presenta una infraestructura o instalación de carácter crítico o estratégico.

En conjunto, estos medios son los responsables de proteger y controlar los perímetros principales, así como los de sus distintas áreas que, en términos de protección física, normalmente estarían clasificadas en zonas: excluidas, restringidas o controladas.

Diseño del sistema

El diseño de un sistema de protección perimetral implica que el director de Seguridad –a través del uso de ciertas metodologías, como el análisis de riesgo, la prevención del crimen a través del diseño ambiental (CPTED) y la aplicación de distintas tecnologías y recursos técnicos y humanos– pueda responder a tres preguntas básicas:

  • ¿Qué proteger?
  • ¿Contra qué proteger?
  • ¿Cómo proteger?

Las consecuencias provocadas por un daño a una infraestructura pueden, en el mejor de los casos, circunscribirse a los límites de la propia instalación. Sin embargo, muchas infraestructuras son interdependientes de otras, lo que conlleva el riesgo de que una perturbación en su sistema pueda generar repercusiones en su propia organización, en su sector o en otros sectores a una magnitud local, regional, nacional e, incluso, internacional. A esto se le conoce como efecto en cascada.

Hablando del sector financiero, hay que considerar que es uno de los sectores con mayor y más fuertes interdependencias hacia los demás sectores.

Como en todo el mundo, cualquier infraestructura en México está expuesta a distintos tipos de amenazas. Entre ellas, destacan los fenómenos naturales como los huracanes, las tormentas y las inundaciones. También las amenazas biológicas, como la COVID-19. Y los riesgos de carácter social como los ataques, asaltos, sabotajes, intrusiones, contrabando de objetos, robo, etc. En adición, son innegables las peligrosas y violentas condiciones en que se vive en muchas de las regiones del territorio mexicano.

A causa de la pandemia de COVID-19, las restricciones de movilidad, la inseguridad, las decisiones del Estado ante la crisis y otras situaciones como la contrarreforma energética, gran parte de la sociedad mexicana experimenta problemas financieros y laborales.

Derivado del colapso de industrias como la restaurantera, el turismo y el entretenimiento, se han registrado mutaciones en las estrategias delincuenciales. Se sabe que diversas organizaciones criminales se han visto obligadas a buscar otras fuentes de ingreso y han colocado su atención en sectores estratégicos, en sus operaciones e infraestructuras.

En marzo del presente año, el general Glen D. VanHerck, jefe del Comando Norte de Estados Unidos, señaló que entre el 30% y el 35% del territorio mexicano está controlado por organizaciones criminales. Y hasta el pasado 6 de junio, casi 90 políticos habían sido asesinados en el marco de las campañas electorales. Sin duda, los cárteles y grupos criminales buscaron, y en muchos casos consiguieron, influir en los comicios con el objetivo de mantener su hegemonía, impunidad y poder.

Lo anterior puede asumirse como un presagio de lo complicado que se volverá el entorno territorial y los desafíos para los operadores de infraestructuras, inmersos en esas regiones, donde muy seguramente aumentarán los secuestros, la extorsión de funcionarios y civiles, las protestas sociales e inclusive los ataques a instalaciones.

Sistema de protección

Derivado de lo anterior, creemos que, a partir de hoy, los diseños de un sistema de protección física deberían estar desarrollados con un balance adecuado a las circunstancias. Es decir, el enfoque ante un territorio con este tipo de expresiones tan violentas, y donde la respuesta por parte de las autoridades es incierta y cada vez más tenue, tendría que estar más orientado a la disuasión y el retraso, principalmente, previendo una detección cada vez más temprana de las amenazas.

Lamentablemente, la mayoría de las instalaciones bancarias no considera estrategias de protección perimetral. Y si lo hace, muchas veces utiliza remedios inservibles como cercos de malla ciclón o de características residenciales. Quizás sea hora de considerar una capa adicional en los sistemas de protección física en bancos pensando en la protección de áreas públicas. Muchas veces, esto no se hace argumentando razones de estética y por errónea percepción de los clientes.

Normalmente, se le ha dado una proporcionalidad mayor al uso de sistemas electrónicos como cámaras y alarmas en el interior de las sucursales, dejando a un lado, y casi en desuso, los componentes de refuerzo territorial y protección perimetral. Ante las actuales circunstancias que prevalecen en nuestro país, conviene reflexionar si es la hora de ajustar el equilibrio entre ambos escenarios.

protección perimetral en entidades bancarias
Las entidades bancarias dejan casi en desuso los componentes de refuerzo territorial y protección perimetral.