¿Cómo es percibida la seguridad corporativa en su organización, en general, y por la alta dirección, en particular?
En nuestra empresa se está trabajando para mejorar la percepción de la seguridad corporativa enfocándonos en varios aspectos. En primer lugar, se está fortaleciendo la infraestructura y la tecnología de seguridad tanto electrónica como arquitectónica. Paralelamente, se están creando protocolos y políticas verificando su eficiencia y asegurando su cumplimiento. Y desde el nivel directivo se están impulsando procesos para generar una verdadera cultura de seguridad que permee en todas las personas y áreas que conforman la organización.
Asimismo, se están estableciendo bases de datos de incidentes con el objetivo de tomar decisiones basadas en información concreta. Se realiza una auditoría continua de los servicios de vigilancia, trasladando la evaluación de la calidad del servicio a los responsables y analizando si se mantiene una correcta relación calidad-precio. Además, todos los procesos se revisan de forma constante para garantizar que se encuentren dentro del marco legal. Finalmente, se está estructurando un conjunto de procedimientos para la atención de emergencias de manera que no se limite a una simple llamada, sino que se traduzca en acciones de apoyo concretas.
¿Qué valor aporta el área de Seguridad Corporativa a la organización? ¿Cómo está contribuyendo a generar una cultura de seguridad?
Sin lugar a dudas, el área de Seguridad Corporativa aporta un valor significativo a la organización, principalmente en la protección de activos y la reducción de pérdidas, así como en la disminución de costos derivados de incidentes de seguridad. También contribuye a asegurar la continuidad operativa, a mejorar la reputación y la confianza tanto interna como externa y a optimizar el uso de los recursos disponibles.
A día de hoy, ¿cuáles son los retos más importantes para el área de Seguridad Corporativa?
En materia de seguridad corporativa, uno de los principales retos es la capacitación del personal del área, ya que actualmente no se cuenta con colaboradores plenamente capacitados para satisfacer las necesidades específicas de la empresa. Además, las áreas de Seguridad carecen de formadores especializados en disciplinas muy concretas.
¿Qué importancia les conceden a las labores de inteligencia en el departamento de Seguridad Corporativa?
Desde mi punto de vista, la labor de inteligencia es fundamental. Sin embargo, el principal problema en este aspecto radica, primeramente, en la necesidad de establecer un departamento que se encargue de dicha tarea. En la actualidad, las prioridades del departamento de Seguridad son otras, pero, en la evolución futura, contar con un equipo de Inteligencia será una pieza clave para la prevención en diversos campos de la seguridad.
Bajo su punto de vista, ¿cuáles serán los principales factores o tendencias que marcarán la evolución de la seguridad corporativa en el periodo 2025-2030?
De cara a los próximos cinco años, considero que uno de los factores más relevantes será la especialización de profesionales en campos específicos de la seguridad, tal y como sucede en otros ámbitos de la sociedad. Además, el manejo y la aplicación de la inteligencia artificial en nuestra especialidad se volverán indispensables.
Para finalizar, en su opinión, ¿cómo influye o cómo puede afectar la situación geopolítica a la seguridad de una organización?
En mi opinión, la situación geopolítica siempre tiene un impacto en la seguridad de una empresa, incluso si a primera vista los procesos organizativos parecen básicos o rutinarios. Es importante recordar que la geopolítica, cuando empieza a perturbar, lo hace principalmente afectando a las infraestructuras críticas que prestan servicios esenciales o producen productos básicos, lo cual genera situaciones complicadas que afectan al desarrollo de la vida diaria de un país tanto a corto como a largo plazo.