Los delincuentes continúan lucrándose a costa de la COVID-19. A las ciberamenazas relacionadas con el coronavirus o la esperada vacuna deben sumarse los laboratorios que realizan test falsos. Así lo ha denunciando el Consejo Nacional de Seguridad Privada (CNSP) mexicano, cuyo presidente, Raúl Sapién Santos, advierte que Ciudad de México, Chihuahua, Jalisco y Tamaulipas son los puntos que concentran más actividades ilícitas.
Un asunto de máxima importancia
Según el máximo responsable del Consejo Nacional de Seguridad Privada, el mayor tráfico de test falsos que se ha detectado tiene lugar entre las localidades fronterizas de Ciudad Juárez y El Paso (EEUU). Asimismo, Sapién Santos señala que se comercializan pruebas falsas en las redes sociales y que los delincuentes llegan a suplantar a importantes firmas farmacéuticas como Bayer.
Para el presidente del Consejo Nacional de Seguridad Privada, se trata de un asunto de máxima importancia. Y no solamente porque la delincuencia saque partido económico de los test del coronavirus. “Si los laboratorios son falsos, los resultados de las pruebas también lo son…”, observa Raúl Sapién Santos. Una situación, opina, que puede disparar la cifra de contagios en México y comprometer la capacidad hospitalaria.
Venta de pruebas ‘similares’ a las PCR
Pero la del Consejo Nacional de Seguridad Privada no ha sido la única denuncia al respecto. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha advertido sobre la comercialización de pruebas rápidas fraudulentas para detectar la COVID-19.
En sintonía con la CNSP, Cofepris ha alertado sobre la venta a través de redes sociales de falsos test, con una supuesta efectividad similar a las pruebas PCR, que se entregan a domicilio y facilitan conocer el resultado en apenas 15 minutos. Para evitar este tipo de fraudes, la comisión federal recomienda acudir a laboratorios autorizados y a comunicar cualquier sospecha en el número de emergencias 911.
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