Claudia Marcela Giraldo, directora ejecutiva de la Cámara Colombiana de Seguridad Privada.
Claudia Marcela Giraldo Directora ejecutiva Cámara Colombiana de la Seguridad Privada

Nuevos retos para la seguridad privada colombiana en 2022

Claudia Marcela Giraldo, directora ejecutiva de la Cámara Colombiana de la Seguridad Privada, expone en este artículo los que, a su juicio, serán los desafíos que habrá de afrontar el sector durante el año venidero.

chaqueta de un guarda de seguridad privada

El gran reto del desempeño de los guardas para el año venidero será, en gran parte, la capacitación.

En la Cámara Colombiana de la Seguridad Privada, al reflexionar sobre la seguridad privada colombiana, en la recta final de 2021 vemos la luz del comienzo del año venidero, que promete traernos oportunidades y la esperanza de recuperarnos y regresar. Sentimos retomar progresivamente la presencialidad habiendo sumado aprendizajes y desarrollado habilidades. Nos encontramos frente a grandes retos. No encontraremos todo como lo dejamos, a algunos no los encontraremos y, con certeza, ya nada volverá a ser igual.

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Los guardas de seguridad, unos héroes

Muchos sienten el cambio del regreso, pero hubo quienes nunca se fueron a esperar que esta situación global terminara. Y se quedaron para cuidarnos, enseñarnos, dar ejemplo y ayudarnos a regresar con empatía y el cumplimiento de normas que nos permitan avanzar sin retroceder en cada lugar de afluencia pública donde se desempeñan.

Ahora los vemos con gratitud y admiración porque nunca antes nos dimos cuenta de lo importante de su labor y de que están en todas partes anticipando, vigilando y previniendo. Los guardas de la seguridad privada colombiana son una gran cuota de esos héroes que nunca se fueron, que pusieron el pecho a los desafíos de sumar bioseguridad a la seguridad en un contexto cambiante, de receso económico y alteración del orden público.

Nuevos servicios de seguridad privada

Los perfiles de los cargos han cambiado, al igual que las habilidades y competencias. Las necesidades y expectativas de los clientes han vislumbrado el nacimiento de nuevos servicios. Los riesgos se han replanteado. Con el uso masivo de la virtualidad, la tecnología ha llegado a ritmo acelerado de innovación, las herramientas se adaptan y responden a los nuevos pedidos. La planeación, los presupuestos y la administración de recursos se han reconsiderado y redireccionado drásticamente. Las organizaciones se han focalizado en sus misiones puntuales y específicas, tercerizando muchas gestiones y actividades.

De forma transversal, en toda esta dinámica multisectorial se evidencia la necesidad de acceder a nuevos y diferentes servicios de seguridad privada. Por supuesto, el guarda se hace evidente y necesario en estos escenarios, lo cual supone que el gran reto del desempeño de nuestros guardas para el año venidero será, en gran parte, la capacitación. Ello le permitirá mantenerse vigente y encontrar en la tecnología un aliado y no una amenaza.

Con esto se abre la posibilidad de brindar valores adicionales al servicio para los clientes. Hablamos del registro de información, hechos y datos y cumplir protocolos que puedan representar insumos para otras áreas de gestión. De esta forma, se contribuye a la trazabilidad estadística y al suministro para indicadores en la toma de decisiones. Y el desempeño y la operación se van especializando más allá del marco genérico de la seguridad para ahondar en cada sector.

Es así como surgen nuevas acreditaciones para quienes trabajan en el sector de la salud o el de la educación. También el ritmo de las tendencias políticas y sociales en el marco de los derechos humanos y en adelante su importante labor y desempeño, abre la puerta a innumerables alcances especializados, sumando valores articulados al servicio de seguridad.

Seguridad privada: importante eslabón

Ahora, cada sector económico valida con mayor énfasis la importancia de la seguridad para sus operaciones. Guardas, supervisores y equipos de la seguridad privada colombiana se han convertido en un importante eslabón que, de forma coordinada, posibilita la reactivación económica desde el sector privado. Y, además, conforma un gran equipo con la fuerza pública y la implementación de políticas gubernamentales en beneficio social. Esto también supone mantener, mejorar y promover iniciativas, espacios, estrategias y herramientas de comunicación y participación para fortalecer la interacción entre los sectores público y privado y la fuerza pública.

La creación de plataformas de gestión de la información confiable que generan los guardas y operativos, desde su conocimiento en materia de seguridad y riesgos, representan un insumo importante, vigente y periódico que corresponde a la realidad. Y ello es así porque, en materia de seguridad, hay indicadores que dependen de variables como denuncias que alimentan estadísticas. Y esto no representa la totalidad de lo que realmente ocurre, mientras que en los reportes de estos operativos hay una fiel y acertada copia de la realidad. Lo cual genera un aspecto amplio e interesante por desarrollar en miras de encontrar soluciones conjuntas ajustadas y acertadas para crear herramientas que articulen plataformas interinstitucionales que nos permitan responder al ritmo acelerado y cambiante en demanda de las diversas necesidades en la seguridad.