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Primer cuatrimestre 2016

artículo técnico

Asociaciones

L

a problemática de la inseguri-

dad ciudadana es un tema de

agenda obligada para cualquier

país de Latinoamérica. La seguridad pú-

blica es un servicio que debería ser uni-

versal, tiene que ser brindado a la so-

ciedad en su conjunto y, en mi opinión,

con mayor esfuerzo a los más pobres,

ya que ellos, como víctimas, son el ros-

tro más duro de este flagelo. El Estado/

Gobierno es el que debería liderar y

gestionar la seguridad pública y ser el

responsable directo de evitar las altera-

ciones de orden social.

La seguridad pública vela por el de-

sarrollo y el bienestar de la población.

Para ello, los Estados se valen de cuatro

instituciones que cumplen un rol fun-

damental: la policía, la fiscalía, el poder

judicial y el sistema penitenciario; sin ol-

vidar, claro está, los esfuerzos de disua-

sión y prevención a cargo de los máxi-

mos dirigentes regionales y locales en

algunos países. Y todo ello, para prote-

ger la seguridad física de los ciudada-

nos y sus bienes.

Pero no olvidemos que la seguridad

ciudadana es tarea de todos y, en este

sentido, los ciudadanos no debemos

ser ajenos al rol que nos toca. En la ac-

tualidad, Latinoamérica sufre un au-

mento sostenido de violencia y de de-

litos. Hablamos de violencia extrema

asociada al narcotráfico, como es el

caso de México y otros países, de vio-

lencia criminal juvenil o de violencia en

el seno de las familias, por citar algu-

nos tipos. Y en esta problemática hay

diferencias en función del enclave: no

es igual lo que sucede en Trujillo (Perú)

que lo que ocurre en Ciudad Juárez

(México). Sin embargo, analizando las

causas vemos que son muy parecidas.

Cultura de prevención

Las actividades del crimen organizado,

y sus efectos nocivos sobre la sociedad,

constituyen uno de los principales fac-

tores de riesgo para el mantenimiento

de la seguridad pública. En la mayoría

de los países de la región se carece de

políticas de Estado adecuadas y que es-

tén articuladas entre las instituciones

que velan por la seguridad ciudadana.

En la práctica, lo que sucede es que las

diversas estrategias y diseños no tienen

sostenibilidad en el tiempo, no hay un

seguimiento y control que permitan ha-

cerlas viables.

Con este artículo no trato de alarmar,

sino de alertar a la ciudadanía de la im-

portancia de asumir una cultura de pre-

vención como norma de vida en todos

los ámbitos de la ciudad, empezando,

sin duda, por nuestros propios hoga-

res. Hoy, la tecnología nos permite con-

tar con una serie de equipos, sistemas,

elementos y servicios de seguridad pre-

ventiva. No importa si vivimos en Lima,

Caracas, México DF, Buenos Aires o Río

de Janeiro. En el sentido de la vulnera-

bilidad que perciben los ciudadanos,

ante una delincuencia cada vez más

violenta, es donde se nota el divorcio

que hay entre el Estado y la sociedad.

Diversas encuestas y estudios ponen

de relieve que esa brecha entre la per-

cepción y la realidad de la inseguridad

en una ciudad se está acortando. Ade-

más, muestran la magnitud de distintos

tipos de violencia, ya sea doméstica, so-

cial, comunitaria o política. Los resulta-

dos siguen siendo negativos: la violen-

cia y el delito siguen avanzando.

¿Qué proponemos?

Por todo lo expuesto, desde APROSEC

realizamos las siguientes propuestas:

1.

Reintegrar a la sociedad en su con-

junto en el respeto a las normas, las

leyes y los derechos humanos por

medio de una campaña intensa, ma-

siva e integral de fomento a la cul-

tura de la legalidad y la prevención.

La desintegración social crea espa-

cios de oportunidad e incentivos

para la inseguridad, la delincuencia

y la violencia. Pero dicha campaña

haría lo contrario porque cohesio-

naría a la sociedad en torno a valo-

res de respeto y solidaridad. Debe-

ría involucrar de manera organizada

y corresponsable, al menos, a las au-

toridades de las ciudades, el sistema

educativo, los medios de comunica-

ción y la sociedad civil.

César Ortiz Anderson

Presidente de la Asociación Pro Seguridad Ciudadana (APROSEC)

La seguridad pública en Latinoamérica

En el sentido de vulnerabilidad que perciben los

ciudadanos ante una delincuencia cada vez más

violenta es donde se nota el divorcio que hay

entre el Estado y la sociedad