Claudia Marcela Giraldo, directora ejecutiva de la Cámara Colombiana de Seguridad Privada.
Claudia Marcela Giraldo Directora ejecutiva Cámara Colombiana de la Seguridad Privada

Día del Guarda de Seguridad La importancia del rol de la mujer en la seguridad privada

Por su condición y resultados efectivos en el desempeño del servicio de vigilancia, en los últimos años ha habido una ganancia en el potencial y las habilidades de las mujeres en el sector de la seguridad privada. Además, la inclusión de la mujer en la seguridad ha permitido abrir una puerta de múltiples posibilidades para el desempeño de la labor de vigilancia.

Trabajadora del sector de la seguridad privada colombiano

En el Día del Guarda de Seguridad se reconocerá el trabajo de las mujeres de la seguridad privada.

El pasado 14 de noviembre celebramos el Día de la Mujer Colombiana. Y el 26 de noviembre haremos lo propio con el Día del Guarda de Seguridad. Era poco común encontrar mujeres trabajando en la seguridad privada. Y como mujer dirigente gremial de este sector en la Cámara Colombiana de la Seguridad Privada, recibo constantes manifestaciones de sorpresa por ello.

Una actividad preventiva

Y es que la seguridad siempre se ha percibido en términos de fuerza y capacidad física. Pero, realmente, esto apunta a un escenario que en la seguridad privada intentaremos evitar. Y sería la última opción en respuesta a un evento desde la parte que llamamos reactiva y que es de mayor competencia de la fuerza pública.

Como en todas las operaciones, todo avanza, se mantiene y mejora. En la seguridad privada, la implementación de sistemas de gestión de calidad nos ha llevado de la reacción en la operación a la prevención. Hemos hecho énfasis en la planeación, el cumplimiento de protocolos, la disuasión y la neutralización, apoyándonos en la tecnología y las comunicaciones.

Valga este preámbulo para entender porqué hay una ganancia en el potencial y las habilidades de las mujeres por su condición y resultados efectivos en el desempeño del servicio de vigilancia.

Reconocimientos a mujeres

Este año, la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada (Supervigilancia), a pesar de la pandemia y la distancia social que debemos mantener, ha querido liderar la iniciativa de conmemorar el Día del Guarda de Seguridad. El año pasado, tan señalada fecha se institucionalizó por el presidente Iván Duque. Y se festejó con un magno evento con la asistencia de más de 4.000 personas; entre ellas, la ministra del Interior, el viceministro de Defensa y el superintendente de Vigilancia y Seguridad Privada.

Este año, para la celebración del Día del Guarda de Seguridad se utilizarán herramientas virtuales. Y se harán reconocimientos a los guardas que se han destacado por hechos en la operación ante eventos de seguridad que, en la mayoría de los casos, se sitúan en la fase preventiva.

Entre los reconocimientos encontramos mujeres destacadas. Muchas de las guardas son madres, un vínculo que supone una responsabilidad: volver ilesas todos los días a casa. La percepción de la relación que se hace entre mujer y debilidad pareciera traducirse en vulnerabilidad. Pero, contrariamente, resulta ser una fortaleza que muchas personas subestiman.

La mujer colombiana, un ejemplo

Tradicional y culturalmente, la mujer colombiana ha sido el eje que articula las familias con su habitual paciencia, constancia y ejemplo. Asumimos la gerencia y economía del hogar, la buena administración de los recursos. Pocos toman decisiones sin contar con la última palabra o, por lo menos, acudiendo al consejo de su esposa.

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También asumimos el seguimiento de las actividades escolares de los hijos, así como su alimentación. Además, supervisamos la presentación personal de cada miembro de la familia. Y estamos atentas a la conciliación, el entendimiento y la comunicación en la convivencia ante la solución de conflictos entre quienes viven bajo nuestro techo, que, en ocasiones, pueden ser más personas que los miembros de la familia.

Responsables y capacitadas

Y es que la mujer tiene la cabeza más fría y es menos irritable. Y posee una inteligencia emocional instintiva o aprendida por ensayo y/o error. Todo ello les ha permitido a las guardas proyectar una imagen de responsabilidad, cumplimiento, mesura, cuidado de presentación personal, capacidad de comunicación con sus compañeros y adecuado trato con los clientes por su capacidad elocuente.

Las mujeres del sector saben que de ellas se tiene una percepción de vulnerabilidad. Y hacen un esfuerzo adicional que se ve en los hechos y datos. Además, cuentan con una capacitación académica y práctica que está reglamentada para todos los guardas por igual.

Ejemplos de inclusión

Esta inclusión de la mujer en la seguridad ha significado una puerta abierta de múltiples posibilidades para el desempeño de la labor de la vigilancia en la seguridad privada. Y así como en esta apuesta se han encontrado beneficios, también podemos anotar que hay beneficios en la inclusión de trabajadores con discapacidad.

Por ejemplo, se ha evidenciado conveniente la altura a la que se encuentran los guardas de seguridad en silla de ruedas que trabajan en sitios de alta concurrencia o afluencia pública como centros comerciales. Y ello es así porque tienen mejor visibilidad de la zona abdominal de las personas, que es donde se suelen guardar armas o esconder cosas ilegales y prohibidas. Y como este, se pueden mencionar más casos.

La seguridad privada es un sector económico de gran importancia, de impacto en indicadores de país y de gestión pública y de gran potencial para la implementación y el seguimiento de proyectos sociales.

Labor importante y necesaria

Sin ahondar en el protagonismo y reconocimiento del papel del guarda en la pandemia, dicha figura es el filtro, emisor y control de seguridad y bioseguridad. Tangencialmente hablando, y a lo que me he referido en detalle en otras oportunidades, vale la pena anotar a propósito de la celebración del Día del Guarda de Seguridad para agradecer y resaltar.

Hay que trabajar desde la dirección gremial por el crecimiento del sector, la incursión y creación de nuevos mercados para generar empleo y establecer convenios para implementar proyectos sociales que permitan a los guardas mejorar sus condiciones de vida, adquirir una vivienda y seguirse capacitando. Será la mejor forma de reconocer y agradecer esta labor de vigilancia que se hace importante y necesaria en esta ola de creciente inseguridad y de insuficientes recursos de la seguridad pública, con la que trabajamos en constante relacionamiento y comunicación.

Es así como vale la pena resaltar la evolución que la vigilancia ha tenido desde el popular Watchmen hasta lo que hoy se conoce como el enorme sector de la seguridad privada. Este último evoluciona cada día en procesos y tecnología. Y a él pertenecen cerca de 400.000 guardas registrados por las empresas de seguridad legales en la Supervigilancia. Profesionales a los que se debe reconocer su labor en el Día del Guarda de Seguridad. A todos ellos, nuestro agradecimiento por su contribución a la seguridad de Colombia.

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El sector de la seguridad privada contribuye a que Colombia sea un país más seguro.