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Monitor para bebés con cámara: ¿cómo evitar hackeos?

Los monitores para bebés con cámara son una herramienta de seguridad muy utilizada. Pero, al tratarse de dispositivos del Internet de las Cosas (IoT), entrañan riesgos para la privacidad de los usuarios. Por ello, los expertos sugieren poner en práctica unas recomendaciones con el fin de evitar que sean hackeados.

un monitor de bebés con cámara en la cuna de un recién nacido

Los vigilabebés con cámara facilitan monitorear a los pequeños de la casa a distancia.

Por Redacción.

Desde hace años, el monitor para bebés se ha convertido en uno de los productos más demandados por los padres. Tradicionalmente, el vigilabebés se basaba en dos dispositivos: uno con micrófono que se colocaba junto al recién nacido y otro con altavoz que facilitaba a los padres monitorear su descanso a distancia. Así, su principal función era alertar a los progenitores, o sus cuidadores, cuando el bebé hacía ruido o se despertaba.

Desde hace tiempo, el monitor para bebés incluye cámara de videovigilancia. De esta forma, se convierte en una herramienta de seguridad más completa para vigilar a los pequeños y su entorno cuando están descansando. Sin embargo, al tener conexión a Internet, desde ESET advierten que este tipo de vigilabebés puede entrañar riesgos para la seguridad y la privacidad.

Tipos de monitores para bebés con cámara

Concretamente, el acceso a estos dispositivos por terceros podría deberse a varios motivos. En unos casos, por pura diversión. Pero en otros hay fines más concretos y maliciosos, como escuchar conversaciones que faciliten acceder a información confidencial o comprobar si una vivienda está vacía para entrar a robar. Actualmente, hay dos tipos de monitores para bebés con cámara:

  • Monitores de radiofrecuencia. Para ser manipulados, es necesario que alguien esté dentro del alcance de la señal y conozca la frecuencia que se está usando. La mayoría emplea comunicaciones cifradas, por lo que, en general, son una apuesta más segura. Pero su funcionalidad es más limitada.
  • Monitores wifi. Están más expuestos a la ciberdelincuencia, ya que se conectan al router doméstico y, a veces, a redes wifi abiertas. Se vulneran forzando su contraseña o explotando las vulnerabilidades del firmware.

En la última década se han producido algunos casos de hackeos a vigilabebés. Uno de los que más alarma produjo fue el que tuvo lugar, hace cuatro años, en EEUU. Tras hackear el monitor para bebés, un ciberdelincuente aterrorizó a una familia amenazando con secuestrar a su hijo.

¿Cómo evitar hackeos en un vigilabebés?

Con el objetivo de prevenir hackeos en vigilabebés, los expertos en seguridad cibernética sugieren poner en práctica los siguientes consejos:

  • Tratar de seleccionar modelos de fabricantes de confianza que hagan hincapié en la seguridad.
  • Instalar actualizaciones de software o firmware en el dispositivo.
  • Adquirir monitores que no permitan la comunicación remota mediante una app. Si no es posible, desactivar el acceso remoto cuando no se use.
  • Establecer una contraseña segura. Y si se puede, la autenticación multifactor.
  • Revisar los registros del vigilabebés con frecuencia para comprobar si hay alguna actividad sospechosa.
  • Asegurar el router inalámbrico con una contraseña robusta, desactivar el acceso remoto al mismo y también el reenvío de puertos o UPnP.
  • De igual manera, el router ha de mantenerse actualizado con parches de firmware.